Otro fracaso de Racing. Ganaba 1-0 con gol de Tomás Chancalay, se durmió antes del descanso y Agropecuario lo dio vuelta con un doblete de Brian Blando.
Racing y una nueva decepción que lo deja con las manos vacías. El equipo de Fernando Gago no pasaba mayores sobresaltos cuando dominaba por la mínima, pero atravesó cinco minutos fatales al término del primer tiempo y Agropecuario pegó dos veces para revertir el resultado y dejarlo prontamente sin Copa Argentina.
La Academia, que arrancó siendo protagonista y haciendo valer la diferencia de categoría, abrió la cuenta a la media hora de juego con un golazo de Tomás Chancalay. El atacante proveniente de Colón le hizo una diagonal bárbara a Leonel Miranda, recibió de frente al arco y definió con una furibunda volea cruzada.
El elenco de Avellaneda ganaba sin atenuantes. Sin embargo, se confió demasiado y el Sojero cosechó lo que fue a buscar con dos baldazos en una ráfaga. Brian Blando, con un disparo de zurda entrando al área y un mano a mano que definió ante la salida de Chila Gómez, anotó a los 43 y 45 para revertir el marcador.
Para colmo de males en el conjunto racinguista, entre medio de esos dos goles se lesionó Carlos Alcaraz, que salió llorando desconsoladamente y se fue directo a los vestuarios tomándose el rostro.
El segundo tiempo fue todo de Racing. Al arquero Williams Barlasina le llegó la hora de lucirse y se convirtió en la figura del equipo de Carlos Casares. La Academia, errático dentro del área, preponderó en la tenencia y pobló la zona de ataque, aunque falló en los metros finales.
El guardameta de Agropecuario le puso el broche de oro con dos mano a mano que le tapó a Javier Correa y sostuvo el 2-1 que le permitió al Sojero dar el batacazo y darle a Racing un golpe bajo.
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