El arquero Franco Armani se lució, Enzo Fernández la metió de penal y River igualó 1-1 en Brasil tras empezar en desventaja.
Que Franco Armani haya sido la figura de la noche habla del arduo trámite que atravesó River en tierra de Fortaleza. Pese a empezar temprano abajo en el marcador, empató rápido, se sostuvo por su guardameta -que se reencontró con su versión copera- y cerró un 1-1 que lo deja cerca de llevarse la zona.
Con este resultado, el Millonario suma diez unidades en el Grupo F de la Copa Libertadores y ahora jugará como local sus últimos dos encuentros frente a Colo Colo y Alianza Lima, que se enfrentaban a última hora en Perú.
El equipo de Juan Pablo Vojvoda jugó con un carácter completamente diferente al del Monumental. Salió a herir a River desde el inicio, copó la mitad de la cancha, presionó la salida de los centrales y logró dar el primer golpe en apenas cuatro minutos de juego.
Lucas Crispim hizo una pared por la banda derecha con Lucas Lima, entró al área y, ante la salida desarmada de Armani, tocó para su ladero Silvio Romero, que le puso firme el botín para empujarla al fondo de la red y poner el 1-0.
Pero ni bien se conectaron los creativos del Millo se originó la jugada del penal -falta a Pochettino- que abrió la puerta al empate de Enzo Fernández.
El primer tiempo terminó igualado solo gracias a Franco Armani, que se lució, se reencontró con su mejor versión y salvó la caída de los argentinos con respuestas a puro reflejo, como un mano a mano a Moisés y un disparo de media distancia de Lima que despejó al córner.
En el complemento mermó Fortaleza y River estuvo cerca de darlo vuelta. A los 20, De La Cruz, después de desquitarse a su marcador por la izquierda, entró al área y remató bajo al primer palo. El remate lo contuvo el guardameta del elenco brasileño.
El encuentro ya no tuvo el mismo ritmo que los primeros 45 minutos y Armani se mantuvo regular con sus respuestas para que River sume un punto valioso en Brasil.
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