Boca se medirá con el Internacional de Porto Alegre, Racing con Flamengo y River con el Paranaense. Boca y River únicamente se enfrentarían si llegaran a la final. ¿Se repetirá?
Al que le tocó la parada más brava fua a Rancing: nada menos que con el actual campeón, el Flamengo, y definiendo de visitante.
Pero Boca tampoco la tiene fácil, porque se mide con el Internacional de Porto Alegre, el equipo que tiene como emblema a una vieja gloria de River, el cabezón D´Alessandro. En este caso, el Xeneize define de local.
Si pasan ambos equipos argentinos se enfrentan en cuartos de final. El camino de esta llave es bastante más complicado que el de la llave de River. Porque después también aparece Gremio, el otro grande de Porto Alegre, Brasil.
El partido de octavos de River es frente al Paranaense, y define de local. Y si pasa, le toca el que gane de Nacional de Montevideo e Independiente del Valle, de Ecuador. El «cuco» de este lado de la llave es el Palmeiras de Brasil, que primero juega contra Delfín de Ecuador y, si pasa, con el que gane de Libertad de Paraguay (que entró por la ventana) y Jorge Wilstermann de Bolivia. Podríamos decir que Palmeiras ya está en la semifinal. ¿Frente a River?
Solo puede haber superclásico, en caso de que Boca y River lleguen a la final. ¿Se repetirá?
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