18 octubre, 2024

Eurocopa: Alemania goleó a Escocia en el partido inaugural.

Con goles de Wirtz, Musiala, Havertz, Fullkrug y Can, el seleccionado germano batió a los británicos 5-1 en el Allianz Arena de Munich. Mañana sigue el certamen con tres encuentros.

En el inicio de la Eurocopa, la selección de Alemania, anfitriona del certamen, superó a Escocia 5-1, brindando una gran exhibición en el Allianz Arena de Munich.

Florian Wirtz, Jamal Musiala, Kai Havertz, este mediante un tiro penal, Niclas Fullkrug y Emre Can le dieron la victoria al elenco orientado tácticamente por Julian Nagelsmann. Para los escoceses descontó Antonio Rudiger al marcar en contra de su valla cuando el partido ya estaba 4-0.

El certamen continuará mañana con tres encuentros: Hungría – Suiza (10 horas), España – Croacia (13) y Albania – Italia (16).

Al borde de la excelencia, con el arquitecto Toni Kroos al frente y con la electricidad de Jamal Musiala, Floriant Wirtz y Kai Havertz, Alemania presentó sus credenciales como candidata al título tras aplastar a Escocia, ganadora en las tribunas, pero arrasada en el campo de juego por una selección cautivadora.

Los hombres de Julian Nagelsmann andaban preocupados por la falta de calor de su público, completamente superado por la efusividad de la afición escocesa en las calles y cervecerías de Múnich. Hasta Julian Nagelsmann e Ilkay Gündogan tuvieron que hacer un llamamiento a su gente para unirse en torno a un equipo con hambre de títulos después de una década sin sumar trofeos a sus vitrinas.

Alemania se puso manos a la obra desde el primer segundo. Presionó de forma asfixiante a los escoceses, incapaces de generar nada, con McTominay, McGee y Robertson completamente superados por la situación. Y Kroos, en modo ejecutor, inició la jugada del primer tanto con un cambio de juego milimétrico de banda a banda que recogió Kimmich. El lateral del Bayern puso la pelota en el borde del área, donde apareció Wirtz para batir a Gunn y comenzar con la lluvia de goles.

Era el minuto diez y Alemania ya estaba adelante. Las gaitas escocesas de la grada se silenciaron para siempre. Las gargantas germanas pidieron más sangre. Y otra vez Kroos, como no, se la concedió. Poco después, en el minuto 20, filtró un pase magnífico a Gündogan. El jugador del Barcelona cedió la pelota a Havertz y éste, a su vez, se la dio a Musiala, que finiquitó la acción fusilando a Gunn con un disparo desde dentro del área.

Alemania no levantó el pie del acelerador y obtuvo un tercer premio en forma de penal que Havertz transformó en el 3-0 con el que se cerró la primera parte. Estaba todo liuquidado ya que esa infracción derivó además en la expulsión de Porteous por su entrada temeraria sobre Gündogan.

Algo más pausados, los alemanes controlaron el resto del choque sin sobresaltos. Amasaron la pelota en la zona escocesa durante casi todo lo que quedaba de partido. Kroos se erigió como el director de todas las jugadas y manejó los tiempos como le dio la gana con un Musiala imparable. Entre él y Kroos cimentaron una victoria que redondearon Füllkrug y Emre Can en el último tramo y que coloreó Rüdiger con un tanto en propia valla para alegría escocesa, que montó una fiesta con el acierto del zaguero del Real Madrid.