River le ganó 1 a 0 a San Lorenzo y sigue vivo por el título

Con gol de Mammana y aguantando 22 minutos con un jugador menos, River superó por 1 a 0 a San Lorenzo y quedó al menos por ahora a cuatro puntos del líder Gimnasia.

En un clásico chato y caliente por momentos, River venció por 1 a 0 a San Lorenzo por un gran remate de Emanuel Mammana en el Nuevo Gasómetro, se recuperó de las derrotas en el Superclásico y con Banfield, y sigue vivo en la pelea por la Liga Profesional: quedó al menos momentáneamente a cuatro puntos del líder Gimnasia. Por su parte, el Ciclón se fue reprochado por su gente.

River jugó un poco mejor que San Lorenzo en el primer tiempo, donde tuvo más jugadas claras y se puso en ventaja con el tanto del defensor, y supo aguantar 22 minutos con un hombre menos en el complemento por la expulsión de Andrés Herrera. El mayor mérito es que necesitaba ganar y ganó, porque tampoco jugó bien y de milagro no se lo igualaron en el final.

Un remate de Nahuel Barrios dentro del área bloqueado. Un buen disparo de Agustín Martegani que tapó Franco Armani. Un cabezazo de Vombergar que fue desviado y rozó el travesaño. Y hasta a los 43 minutos un gol de Nicolás Blandi que fue bien anulado por offside. Si el ex Boca arrancaba un segundo antes su carrera en el área, hubiera valido. Ese final, con River ganando con 10 y San Lorenzo yendo con todo por el empate, fue lo mejor de un clásico flojo.

River había mostrado incipientemente buenas cosas en la primera parte: el dominio del balón, un mediocampo en un buen nivel, con un Esequiel Barco enchufado, haciéndose cargo del juego (lo que tantas veces Gallardo le pidió a Quintero) y un De La Cruz muy activo. Sin embargo, no mantuvo nada. En el inicio del complemento se esfumó todo y después de la roja a Herrera, lógicamente se dedicó a aguantar el resultado.

Por su parte, el Ciclón salió con el plan de cerrarle las líneas de ataque a River replegado en su campo y atacar de contraataque. Pero no funcionó. Le costó mucho llegar al arco de Armani. Sufrió más de lo que hizo sufrir al rival. Su única clara en el primer tiempo: un tiro libre que detuvo Armani. O sea, una jugada aislada del juego. Y con esta derrota, llegó a cinco fechas sin sumar de a tres.

San Lorenzo quedó relegado (aunque no afuera) de la lucha por clasificar a la Sudamericana 2023: está a cinco puntos, con siete equipos arriba, de los puestos con boleto a la Copa. Sufrió el «movete, movete, dejá de joder» y murmullos de su hinchada y se fue con la cabeza mirando al césped.

Mientras que River festejó con todo la victoria: los abrazos, las palmadas de Gallardo a algunos de sus jugadores, el círculo entre los futbolistas tras el final, hablan de lo necesaria que era la victoria. Una que toma más valor al ser en un clásico, de visitante, con mitad de un tiempo con un jugador menos y donde con Rubén Darío Insúa el Ciclón no había perdido. River dijo: «Yo no me voy por vencido».