Con un Julián Álvarez bestial, autor de seis tantos, River aplastó a Alianza Lima 8-1. Simón y Gómez completaron. El Millo pasó como el segundo mejor primero.
Un cumpleaños redondo pasó River en su casa. El invitado fue Alianza Lima, que se comió ocho goles y padeció a un ya indescriptible Julián Álvarez, protagonista de todos los flashes del aniversario 121 del club de Núñez en el que la próxima joyita del Manchester City dio una cátedra de fútbol.
El Millonario fue absolutamente superior al equipo peruano y consiguió su cometido: golear, quedar como el segundo mejor primero y definir la mayor cantidad de partidos de local en la etapa eliminatoria.
Para eso contó con un Álvarez fuera de serie, comprometido en el área rival, contundente, atrevido, letal, astuto y goleador. Atributos que lo convirtieron en el primer jugador de la institución en convertir seis goles en un solo encuentro.
River fue 100% Julián y Julián fue 100% River. La primera de la media docena de conquistas de Araña aconteció a los 15 minutos. Asistencia de Santiago Simón, diagonal del delantero y definición cruzada para el 1-0.
A los 17, la misma conexión y segundo grito de Álvarez. Simón desbordó por la derecha, envió rasante al medio y el cordobés se estiró por el suelo para empujarla al fondo de la red. Desde allí, el trámite se encaminó y La Banda se adueñó de la noche.
Cinco minutos previos al descanso, Julián prendió una bomba desde afuera del área que explotó adentro del arco. Inició inclinado hacia la izquierda, trasladó hacia el medio y desenfundó un misil incontrolable para el arquero.
A los 8 del segundo tiempo sonó cuarteto en el Monumental. Entre Barco y Álvarez ensayaron una pared, entraron al área a puro toqueteo, el 9 no pudo meterla y la agarró bollando Simón para meterla.
El quinto llegó 60 segundos después. Al arquero le quedó largo un control tras un pase atrás, Álvarez le ganó la posición con el cuerpo, le birló la pelota y la tocó sutilmente a la meta. Mientras que un minuto más tarde, el infalible quedó mano a mano, la picó de derecha y anotó el 6-0.
Sobre la parte final del match, Elías Gómez estiró la diferencia a siete goles y Julián Álvarez volvió a lucirse para redondear una noche histórica. El del honor para el equipo de Lima fue de penal, a los 89, por intermedio de Lavandeira.
El resultado traduce lo que fue River en el campo. Una verdadera máquina, arrasador, demoledor. Pero también hace notar cuánto vale Álvarez y como lo extrañará Gallardo la segunda parte del año.
En el otro encuentro del grupo, Fortaleza superó a Colo Colo 4-3 de visitante y también pasó de ronda.
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