23 noviembre, 2024

Una familia necesitó $964.620 para no caer en la pobreza en septiembre

Según los datos del Indec, un grupo familiar requirió casi un $1 millón para no ser pobre. Mientras que para no ser indigente se necesitó de $428.720.

Una familia tipo necesitó ingresos por $964.620 en septiembre para no caer en la pobreza y para no caer en la indigencia se requirieron $428.720, según informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Durante septiembre, la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) fue de 1,7% mientras que la de la canasta básica total (CBT) fue de 2,6%.

De esta forma, la CBA y la CBT acumulan en lo que va del año incrementos del 78,1% y 94,6% y resultaron en variaciones interanuales del 189,9% y 202%, respectivamente.

El organismo dio cuenta también que el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que solo reúne la comida mínima para la subsistencia, aumentó 1,7 % el mes pasado, por lo cual el mismo grupo familiar necesitó contar con ingresos por $ 428.719 para no caer debajo de la línea de la indigencia.

En los nueve primeros meses del año la CBT aumentó 94,6 % y la CBA el 78,1 %. Esta diferencia se debe a que las tarifas de los servicios públicos, y el transporte, se encontraban con mayores aumentos, a diferencia de lo que pasaba durante el gobierno de Alberto Fernández y Cristina de Kirchner.

El Índice de Pobreza alcanzó al término del primer semestre del año al 52,9%, informó el Indec. De esta manera, se ubicó por encima del 41,7% de finales del año pasado y del 40,1% del período enero-junio del 2023.

Por su parte, el Índice de Indigencia, entendido este como los pobres cuyos ingresos no son suficientes ni siquiera para comprar la cantidad mínima de comida que permita la subsistencia, se ubicó en 18,1%. A finales del año pasado había trepado al 11,9%, y entre enero y junio del 2023 se ubicaba en 9,3%.

Cómo se mide la pobreza y la indigencia

La CBA se ha determinado tomando en cuenta los requerimientos normativos kilocalóricos y proteicos imprescindibles para que un varón adulto de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra durante un mes esas necesidades (adulto equivalente).

A su vez, se seleccionaron los alimentos y sus cantidades en función de los hábitos de consumo de la población a partir de la información provista por la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo).

Para determinar la CBT se amplía la CBA considerando los bienes y servicios no alimentarios. La estimación se obtiene mediante la aplicación del coeficiente de Engel (CdE), definido como la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.

La composición de cada hogar, en términos de adultos equivalentes, determina un valor de CBA específico para ese hogar. Ese valor surge de la multiplicación del costo de la CBA del adulto equivalente por la cantidad de adultos equivalentes que conforman el hogar.

Por su parte, el índice de precios al consumidor (IPC) se situó en septiembre en el 209 % interanual, su quinta desaceleración consecutiva, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

En el noveno mes del año, los precios al consumidor crecieron un 3,5 % en comparación con agosto, lo que implica una desaceleración con respecto a la tasa mensual del 4,2 % que se había registrado en el octavo mes.