24 noviembre, 2024

Alpargatas abrió sus puertas y hace barbijos

La fábrica está cerrada. Más de 400 trabajadores cumplen con el Aislamiento Social, Preventivo y Obli­gatorio decretado por el Gobierno Nacional el 19 de marzo pasado para evitar la propagación del Covid-19.imagen ilustrativa

El silencio de las máquinas reflejaba, hasta la semana pasada, la quietud de una producción que quedó a medias, finalizada o apenas iniciada de acuerdo al grupo humano que estuviera a su cargo, dado que durante 24 horas, de lunes a domingo, tres grupo de trabajadores movilizan la planta de Al­pargatas Textil.

Desde hace una semana la fábrica recobró algo de su movimiento habitual. Un grupo de poco más de 20 personas están trabajando en la fabricación de barbijos que serán entregados al Go­bierno provincial para el uso de la ciudadanía. “No son los quirúrgicos, pero cumplen con las medidas solicitadas a nivel internacional y son la­vables porque están realiza­dos con tela de gabardina y friselina”, explicó a NORTE de Corrientes el vicepresi­dente de la compañía, Enzo Mária.

La idea es realizar entre cinco y diez mil barbijos. “Vamos a hacer todos los que podamos en las próxi­mas semanas”, explicó Má­ria, quien además comentó que tienen material sufi­ciente como para continuar fabricando los barbijos que los mismos trabajadores di­señaron en el laboratorio con el que cuentan. “Es cier­to que es un momento difícil para todas las pymes, pero también es una oportunidad para ser solidarios y ayudar en todo lo que se pueda”, puntualizó.

Hoy los 400 trabajado­res de la fábrica está en sus casas. Hasta el momento, explicó el vicepresidente de Alpargatas, no tuvieron problemas para cumplir con el salario de los empleados, aunque no desconocen el in­conveniente que esta situa­ción traerá aparejado en los próximos meses. “Nosotros podríamos volver a producir, pero si lo hacemos será con la mitad del personal porque hay que cuidar las condicio­nes de salubridad de cada uno de ellos y además, por más que podamos producir, hoy la cadena de comercia­lización está interrumpida porque los negocios están cerrados y por ende, no te­nemos dónde vender nues­tros productos. El regreso será paulatino y con muchas restricciones por la endeble situación económica de todo el país”, reflexionó.

Así, los trabajadores que cotidianamente producen hilos o tela de jean hoy están dedicados a la confección de barbijos para proteger a la ciudadanía correntina.s

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