La estabilización de la macroeconomía, las mejores condiciones financieras y la caída del riesgo país ponen al país en la mira de las empresas internacionales .
Cada vez más marcas internacionales comienzan a ver a la Argentina como un posible destino para invertir. Si bien el 2024 fue un año complicado para el consumo masivo, registró su peor año en dos décadas, los indicios de recuperación de los últimos meses sumado a la estabilización de la macroeconomía, las mejores condiciones financieras y un riesgo país que llegó a perforar los 600 puntos básicos, perfilan al 2025 como un año mucho más positivo.
Al mismo tiempo, la promesa de una inminente salida del cepo cambiario entusiasma a las empresas que observan al mercado argentino el considerable repunte de los salarios, tanto formales como informales.
Marcas que miran hacia la Argentina
En mayo de 2024 se dio a conocer la noticia de que la marca de lujo Dolce&Gabbana, buscaba abrir su primer local en Argentina en la primavera de este año.
En ese sentido, Alfonso Dolce, CEO de la firma, explicaba que para elegir un destino este tiene que tener dos condiciones: ser una ciudad turística y destino de negocios, Buenos Aires cumple sobradamente ambos requisitos.
Otra marca que ya tendría todo arreglado para desembarcar en el país es la cadena francesa deportiva Decathlon, que estuvo en entre 2000 y 2002. En esta ocasión, la empresa llegaría a través del Grupo One y, según La Nación, abriría entre 20 y 30 tiendas de la marca en Argentina.
De acuerdo con Bloomberg Línea, hay otra marca que ya se había anticipado a los nuevos desembarcos: Victoria’s Secret. La marca de lencería y belleza abrirá un local en el shopping Unicenter y otro en Galerías Pacífico. Según lo informado, la apertura será en los primeros meses del año.
“Según anticipó Clarín, Pizza Hut intenta nuevamente su llegada al país, luego de haberse retirado en 1997, mientras que otras marcas como Chanel, Calvin Klein y Tommy Hilfiger definen una expansión de sus negocios.
¿Por qué las marcas eligen Argentina?
“Los drivers que impulsan en la llegada de marcas de afuera a la Argentina es por un lado las variables macro, sobre todo la estabilidad económica, que eso da más tranquilidad, la inflación controlada y la apertura a la importación”, contestó a Bloomberg Línea Marcelo Schijman, dueño de Franchising Company.
Mientras que para Agustín Bidoglio, gerente de Franquicias de Canudas, además de la estabilidad macro está la desregulación en la burocracia start-up y “la exposición mediática del recupero económico a nivel mundial está repercutiendo en todas las esferas corporativas internacionales”.
“Todos los días recibimos consultas para instalarse en el país mediante Master Franquicias o alineados al RIGI para sub-franquiciar”, dijo a este medio.
Aun así, hay que tener en cuenta los obstáculos que presenta el país. Argentina cuenta principalmente con tres problemas: falta de políticas a largo plazo, la inestabilidad cambiaria y la inflación.
Los franquiciantes internacionales piensan sus proyectos a 10 o 20 años, por ende, hay que darles previsibilidad y estabilidad, algo que en el país no suele suceder como consecuencias de las diferencias ideológicas entre los gobernantes.
Habrá que esperar para saber si finalmente Argentina puede terminar de romper el maleficio y comenzar a planificar a futuro. De momento, las marcas comienzan parecen que comienzan a llegar.
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