La Justicia estima que el fraude al estado cometido por el puntero del PJ ronda los 8 millones de pesos. Siguen apareciendo nuevos datos que dan cuenta de los entramados tras las tarjetas de la corrupción.
A medida que avanza la causa de Chocolate Rigau por estafa al Estado argentino, se van conociendo nuevas pistas que dejarían en evidencia la trama de los presuntos cómplices, los dueños de las 48 tarjetas de débito que el puntero del PJ tenía en su poder, con el poder Legislativo.
Según detalló Josefina López Mac Kenzie en un informe exclusivo para Somos Buenos (TN) hay dos tarjetas de las 48 que serían de dos empleados de la Cámara de Diputados, Álvaro Agra y Brenda Gisele Caro, quienes, además, trabajan en una casa de cambio de Carlos Melzi, hombre del Frente Renovador de La Plata.
Agra y Caro son empleados de la Cámara de Diputados, su vínculo con la Honorable Cámara es reciente, enero de 2023, e igual que todos los 48, pertenecen a la categoría de contratados “Bloque Político” de la Legislatura. Pero ambos trabajan en una casa de cambio.
En el legajo de Álvaro Agra, se declara bajo juramento que trabaja media jornada en una agencia de cambio ubicada en la avenida Cazón 1519, frente a la Municipalidad de Tigre: es una de las sucursales de la financiera Karuna Group. Del mismo modo, Brenda Caro declara que es “empleada de comercio” en la avenida 7 N° 733, entre 46 y 47, de La Plata: es el domicilio de otra sede de Karuna.
Karuna es una financiera que arrancó sus actividades en 2018 y hoy asegura tener diez sucursales “estratégicamente ubicadas” en la provincia de Buenos Aires y no hacen operaciones por transferencia, según promocionan en las redes sociales. Según el último Informe sobre Entidades no financieras que tiene publicado el Banco Central, uno de sus accionistas es Juan Ignacio Agra; otro, Juan Bautista Melzi; y otro, Carlos Emilio Melzi. Este último es un referente del Frente Renovador de La Plata, exconcejal, martillero, oriundo de Tolosa y empleado de la Legislatura. Dos de las tarjetas que usaba Chocolate dicen “Melzi”.
Textualmente, el papelito manuscrito que Chocolate guardaba junto a la tarjeta del Banco Provincia de Brenda Caro dice: “2023. N.Y.0. CARO=MELZI”. Y en el caso de Álvaro Agra, esa anotación dice: “2023. D.O.I. AGRA=MELZI”. Con eso iba al cajero.
En cuanto a la tarjeta de Agra, el puntero extrajo plata el 5 de septiembre a las 7:09 de la mañana; el 6 de septiembre a las 20:45; y el 7 de septiembre a las 19:10; el 8 de septiembre a las 19:17; y el 9 de septiembre a las 19:50. En los tickets que guardaba Chocolate junto a esta tarjeta figuran también extracciones diarias de $30.000 realizadas en agosto.
Carlos Melzi es una de las pocas personas que se hicieron eco de un polémico tweet del vicepresidente de la Cámara de Diputados, Rubén Eslaiman, que rompió el silencio institucional sobre el caso para intentar desacreditar a un militante político que lo mencionó en una entrevista concedida a Telenoche.
Eslaiman no dijo nada sobre las tarjetas de la corrupción, sobre Chocolate ni sobre la unidad básica del Frente Renovador conducida por el concejal Facundo Albini. Solo se refirió a la fuente, fue permeable a una operación de prensa que había esparcido varias mentiras sobre la entrevista y viralizado documentación íntima del testigo. Melzi compartió el posteo de Eslaiman. Según una nota de Carlos Pagni en La Nación, también una familiar de Eslaiman estaría ligada a la financiera de los Melzi.
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