24 noviembre, 2024

Tras encontrar a la menor, detienen a un joven y cambian el foco de la investigación

Fue determinante la pericia de odorología y el accionar de los perros de la Policía que marcaron un lugar donde habría estado la niña de 12 años. 

La aparición de la niña de 12 años que estuvo perdida tres días, derivó en una nueva investigación por “supuesto abuso sexual” y detuvieron a un joven de 20 años. La causa pasó a la Dirección de Delitos Sexuales. Fue determinante el accionar de los perros de la Policía al marcar un lugar en el que habría estado la menor.

El hombre de 20 años fue demorado y posteriormente la Justicia ordenó su detención al hallarse elementos que vinculan la presencia de la menor en su casa, ubicada en el barrio Punta Taitalo, cerca de la costa del río Paraná.

El detenido es hijo de una mujer oriunda de la ciudad de Mercedes, quien hace un año se radicó con su familia en Corrientes.

Esta señora habría sido uno de los tantos testigos que se acercó a la policía a brindar su aporte, quien dijo a los investigadores de la Comisaría de la Mujer y el Menor II que había visto a una chica parecida a la niña buscada en una parada de colectivos de su barrio.

Un detalle muy particular de su relato que no pasó inadvertido fue la mención de un arito de oro, aunque también brindó muchas incoherencias. De todos modos, se investigó, pero no se obtuvo nada concreto. Incluso su hijo —que ahora está detenido— fue demorado el jueves, un día antes de la aparición de la niña. Ningún elemento lo vinculaba hasta entonces con ella, dijeron los investigadores a El Litoral.

Sin embargo, llamó la atención el marcado nerviosismo que mostró ante determinadas preguntas. Ese detalle fue el detonante para que la fiscal de Instrucción Nº 1, Lucrecia Troia Quirch, solicite allanar su casa.

La medida judicial se cumplió el viernes por la tarde, alrededor de las 18.

En tanto, el jueves la familia de la menor cortó el tránsito sobre la avenida Armenia, a la altura de la Escuela 14. Quemaron cubiertas y exigieron la inmediata aparición de la niña. En la ocasión ya se hablaba de que podría estar en la zona del Molina Punta, sin embargo, en el expediente de la causa nada había al respecto. Tampoco hubo ningún informe oficial de su estadía en Monte Caseros ni de tantas versiones infundadas que surgieron.

Viernes

El ministro de Seguridad, Buenaventura Duarte, el subsecretario de Seguridad, Osvaldo de los Santos García, y el jefe de la Policía, comisario general Alberto Molina, brindaron una conferencia de prensa el viernes en la que dijeron que más de 300 personas buscaban a la menor por agua, por tierra y por aire.

Ya manejaban la versión de que alguien podría estar reteniendo a la menor, pero faltaban evidencias. En medio de la confusión y casi al término de la conferencia, surgió una noticia que llenó a todos de esperanza. En el baño del parque Camba Cuá hallaron a una niña en edad escolar y todo indicaba que era la menor buscada. Fueron pocos minutos de algarabía. Aseguran que el parecido era mucho, pero no era la niña.

Otra vez, una pista frustrada. El curso investigativo avanzaba. El comisario general Ramón de la Cruz Barrios bajó en persona hasta la Comisaría de la Mujer del barrio 17 de Agosto para dirigir el operativo de búsqueda.

Para las 18 se puso todo en marcha para al allanamiento de la casa del sospechoso, quien ya había quedado en libertad por falta de pruebas que lo incriminaran.

La comitiva policial de la Comisaría de la Mujer arribó a la humilde casa situada cerca del río.

Los policías no hallaron nada que situara a la menor en el lugar, aunque de todos modos restaba la pericia de odorología, para lo cual esperaban a la División Canes.

En ese momento se recibió el aviso de la aparición de la niña con su uniforme escolar en un lugar alejado de Punta Taitalo, sobre la avenida Independencia y calle Godoy Cruz. La algarabía parecía que sellaba todo. El grito de felicidad y emoción estalló en sus familiares, que protestaban con un corte de tránsito en El Águila, Ruta Nacional 12 y avenida Libertad.

Pero la pericia policial de la segunda jefa de la Comisaría de la Mujer sería clave para la causa. Decidió aguardar el arribo de los perros, mientras todas las miradas apuntaban al estado de salud de la menor.

El perro de la División Canes “marcó” un par lugares en la casa, lo cual indicaba que la menor había estado allí. Eso fue determinante para que la Justicia librara la orden de detención del joven.

De todos modos, quedan muchas cuestiones que se irán resolviendo con el paso de los días, para lo cual será crucial la declaración de la menor en Cámara Gesell, algo que se dará en el marco de otro expediente judicial, que podría derivar en una grave imputación al detenido.

Fuente: El Litoral