24 abril, 2024

Argentina se abstuvo de votar la resolución de la OEA que condenó las elecciones fraudulentas en Venezuela.

La Organización de los Estados Americanos aprobó un proyecto que repudia los comicios venezolanos y desconoce el resultado, que no fue apoyado por el representante argentino, Carlos Raimundi.

En sintonía con el silencio y la postura del presidente Alberto Fernández con relación a las elecciones en Venezuela del pasado fin de semana, el embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, se abstuvo de votar una resolución que condenó los comicios y desconoció sus resultados, al considerarlos “fraudulentos” y que “no fueron libres ni justos”.

En la previa del encuentro, la expectativa estuvo puesta en la posición de Raimundi, sobre todo tras su discurso en el mismo foro el pasado mes de septiembre, respecto al informe de la ONU sobre la violación de derechos humanos en Venezuela.

Ya en octubre pasado el Consejo Permanente de la OEA había aprobado una resolución (de la que Argentina se abstuvo) en la que advirtieron “que el reconocimiento de las elecciones a la Asamblea Nacional de Venezuela dependerá del establecimiento de las condiciones necesarias de libertad, justicia, imparcialidad y transparencia, garantizando la participación de todos los actores políticos y de la ciudadanía, la liberación de los presos políticos, con plazos razonables para su celebración y que cuenten con observación electoral internacional independiente y creíble”.

Sin embargo, esas condiciones no se dieron y, a pesar del reclamo internacional, Maduro siguió adelante con los comicios, en donde más del 80% de los venezolanos se negaron a participar, y 50 países del mundo democrático anunciado que desconocen su resultado.