25 noviembre, 2024

Destituyeron a la jueza de La Rioja que había pedido una coima de $8 millones para agilizar una sucesión

Norma Abate de Mazzuchelli fue juzgada y ya no podrá ejercer. El tribunal la encontró culpable de “mal desempeño” de sus funciones como magistrada.

Un jury de enjuiciamiento destituyó a la jueza Norma Abate de Mazzuchelli tras haber sido filmada pidiendo una coima de ocho millones para agilizar el trámite de una sucesión en La Rioja.

El jurado compuesto por seis miembros, entre ellos la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la provincia, decidió declarar a la jueza riojana culpable de “mal desempeño de sus funciones como magistrada de la función judicial de la provincia de La Rioja”.

También decidieron destituir a Abate de Mazzuchelli del cargo de magistrada “en virtud de las conductas lesivas para los intereses de la sociedad, la manifiesta indignidad moral demostrada y el quiebre de la confianza pública en la magistratura”.

En paralelo, los jueces rechazaron las diferentes nulidades que habían sido planteadas por la defensa de la jueza. Entre ellas se encontraba el pedido de nulidad relacionado con “la naturaleza del proceso en la renuncia de Mazzuchelli”.

La estrategia de los abogados defensores era que Abate de Mazzuchelli presentara la renuncia a su cargo como magistrada, en lugar de que sea destituida por el jury de enjuiciamiento como finalmente ocurrió. De esa manera, la jueza no hubiese perdido beneficios como la jubilación de privilegio.

El escándalo protagonizado por la jueza comenzó luego de un informe de Telenoche Investiga en el que salió a la luz una cámara oculta donde la magistrada pedía una coima de ocho millones de pesos para tramitar una sucesión.

Pocos días después se realizó una denuncia que derivó en dos causas distintas: una penal en la que está imputada por el delito de concusión y un proceso de juicio político en el que se definió su mal desempeño, se la removió de su cargo y, por ende, perdió los fueros.

La primera en declarar en la causa fue la denunciante. Se trata de una mujer que administraba una sucesión familiar y había visitado a la jueza porque el expediente permanecía aletargado. Cuando llegó al despacho, Mazzuchelli le pidió ocho millones de pesos por su labor en la sucesión, con el argumento de que su sueldo de funcionaria era bajo. Después disminuyó el precio a cinco millones. Ese intercambio quedó filmado.

Saavedra denunció a la jueza el 15 de mayo y en su presentación ante los seis miembros del jurado también dijo que Abate de Mazzuchelli le había enviado emisarios a presionarla para que pagara por el “reconocimiento”.

La primera audiencia del juicio fue este lunes, pese a que el debate debía comenzar el 2 de julio. Esto se debe a que las autoridades del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de La Rioja aceptaron diferentes recursos pedidos por la defensa de Mazzuchelli para suspender el debate.

En un comunicado oficial, el TSJ, presidido por la jueza Gabriela Asís, dejó en claro que se había podido fijar fecha tras “sucesivas sesiones donde se resolvieron todos los planteos formulados por la magistrada acusada, entre ellos las recusaciones planteadas”.

En aquella oportunidad, argumentó que la suspensión del juicio “se realizó pensando en que el procedimiento se desarrolle con todas las garantías y obligaciones previstas por ley y de esta manera, prever cualquier nulidad que pudiera producirse con posterioridad al inicio del juicio e incentivando que estos órganos funcionen normalmente”.