Tras la suba de las alícuotas a la soja, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca brindó detalles sobre el decreto y dijo: “Estamos convencidos de que estamos en este esfuerzo contribuyendo al bien común”.
Julián Domínguez, ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, brindó una conferencia de prensa en la mañana de este sábado 19 de marzo para brindar detalles de la suba de alícuotas a la soja anunciada hoy, y aseguró que el Gobierno tiene la decisión de “no tocar las retenciones de maíz, trigo, soja y aceite de girasol”.
“El Presidente de la Nación nos encomendó a sus ministros la tarea de instrumentar las medidas necesarias para estabilizar al precio del trigo a valores prebélicos mientras duren las consecuencias del aumento a causa de la guerra y desacoplar el precio argentino de los precios internacionales”, sostuvo Domínguez en relación a las posibles consecuencias económicas de la invasión de Rusia a Ucrania.
El ministro destacó que el presidente Alberto Fernández le encomendó tener en cuenta dos objetivos: “Tratar de cuidar a los consumidores y que la medida no perjudique a los productores argentinos”.
“Por eso el Presidente ha decidido la creación del Fondo Estabilizador Temporal del Trigo Argentino, cuya instrumentación y administración quedará a cargo exclusivamente de la Secretaría de Comercio Interior, que constituirá un fondo fiduciario al respecto y dará en los próximos días las indicaciones”, explicó Domínguez.
“En lo que a nosotros hace, la medida establece la suspensión temporaria del diferencial de 2%de los derechos de exportación de harina y aceite de soja del decreto 790 del año 2020. Esto hará que vuelvan al 33%, porcentaje que ya las empresas le descuentan al productor, por lo que no se los afectará con esta medida”, detalló.
Según el funcionario, la medida alcanza a 11 empresas exportadores, de las cuales 8 representan el 95% del total de las exportaciones. “Respecto de los productores argentinos que han provocado una cosecha récord en trigo, hemos decidido abrir los registros de exportación de la cosecha 22-23 por un total de 8 millones de toneladas de trigo que se suman a las 2 millones de toneladas ya autorizadas. Con esta decisión pretendemos lograr el objetivo de darles previsibilidad para la próxima siembra y lograr un nuevo récord de producción”, compartió.
“Estamos trabajando para darle a la gallina de los huevos de oro de este país, que es el productor, la previsibilidad y la confianza que requiere”, enfatizó Domínguez. “Estamos convencidos de que estamos en este esfuerzo contribuyendo al bien común”, remarcó.
Cuando comenzó la rueda de prensa aseguró que el Gobierno tiene la decisión de “no tocar las retenciones de maíz, trigo, soja y aceite de girasol”, dado que “cada vez que se afectaron las retenciones la Argentina cayó en su intención de siembre”.
El agro manifestó su descontento
«Esto genera un clima de desconfianza e incertidumbre”, anticipó a La Nación+ Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). “Creo que va camino a una protesta nacional», advirtió tras conocer la medida.
Mientras que desde la Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA) emitieron un comunicado en el que señalan que la medida «no tiene legalidad”, que desincentiva las exportaciones y que atenta contra «la industrialización de la soja en el país». «Las empresas agroexportadoras están analizando todas las acciones judiciales para cuestionar dicho derecho», informaron.
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