25 abril, 2024

¡Se despertó! Boca se impuso a puro golazo en La Bombonera

Pol Fernández, Marcos Rojo y Sebastián Villa se lucieron en las redes para el 3-1 de Boca sobre Estudiantes. Levantó el equipo de Ibarra. El Pincha sigue flojo.

Quedaron algunas secuelas, pero Boca parece haberse despertado de la pesadilla. Y lo hizo con una gran reacción después de la pobre imagen en La Paternal: venció al complicado Estudiantes 3-1 con oficio, momentos de buen juego y tres golazos, como para acomodarse tanto en la tabla como en la idea de Hugo Ibarra.

La presentación del Xeneize se ganó los aplausos apenas se levantó el telón. El más destacado de la obra fue Alan Varela, con un rol protagónico en su vuelta al equipo titular gracias al DT. El juvenil pagó con fútbol esa apuesta del nuevo cuerpo técnico y llevó los hilos de un equipo que salió a plantar bandera desde el arranque.

Guillermo Fernández, con Luis Vázquez como gran compañero de escena, fue quien hizo delirar La Bombonera con una volea de pique al piso espectacular para el 1-0. La jugada inició por la derecha. El mediocampista elevó un centro que, después de un desvío en Villa, se fue largo. Vázquez no se dio por vencido, se la birló a Godoy y la cambió de banda para que ‘Pol’ ensaye una especie de tijera por el segundo palo.

Al descanso se fue Boca con la mínima ventaja en el bolsillo, pero después del entretiempo estiró la diferencia ante un Estudiantes que apenas se había animado sobre el cierre del primer periodo con un cabezazo débil de Leandro Díaz.

A los 58, Marcos Rojo controló por la medialuna un despeje corto del Pincha luego de un tiro de esquina. Pese al tumulto de gente que tenía de frente, el defensor cargó la barra de potencia, cerró los ojos y la clavó en el ángulo. No lo gritó por lo que significa el rival en su carrera, pero una sonrisa pícara sabía que marcó un golazo, y el dueño de casa se puso 2-0.

Diez minutos más tarde, Villa entró solo por la banda izquierda con una defensa pincha desolada. Corrió, llegó hasta el balón y de primera la mandó a las redes de cucharita con Andújar tirando manotazos en el camino.

Sobre el final, Estudiantes cambió tres cabezazos por un gol de Jorge Morel, que sirvió para decorar el resultado. Es que Boca no le dio lugar a ilusionarse y hasta pudo haber marcado el cuarto. Se plantó en 3-1 y logró una victoria que necesitaba, con esa muestra de rebeldía que le faltaba. De paso, dejó a los de La Plata lleno de dudas a nada de jugar por la Copa.