Con gol de Enzo Copetti a los 36 minutos del segundo tiempo, Racing venció a Lanús en La Fortaleza y se trepó a la cima de la Liga Profesional.
Racing le ganó 1-0 a Lanús en La Fortaleza por la fecha 26 de la Liga Profesional: Enzo Copetti convirtió el único gol del partido para darle un triunfo de oro a la Academia, que quedó como único puntero del torneo, al menos hasta que Boca visite a Gimnasia el jueves a las 15. El Granate jugó un buen partido, pero no le alcanzó y se despidió de su gente tras un flojo año.
Hay goles y goles. Todos valen uno, sí. Pero simbólicamente, algunos se cotizan mucho más. Y este tanto de Copetti puede valer un campeonato para Racing. Todavía falta, es cierto, pero este fue el grito que le permitió a la Academia llegar con chances concretas de campeonar a la última fecha. Porque no ganar era servirle en bandeja el torneo a Boca.
Y por cómo se dio el partido, el gol fue un gran desahogo. Trámite complicado de arranque: Lanús se armó bien de abajo para arriba y no lo dejó jugar cómodo al equipo de Fernando Gago. Solidaridad y compromiso de todos los futbolistas Granates para correr, meter, replegarse y presionar. En 80 minutos, Racing no pudo hacer lo que sabe, y eso fue mérito del Grana.
Un cabezazo que se fue por arriba del travesaño del propio Copetti sobre el final del primer tiempo y un remate de afuera del área de Matías Rojas que se fue por al lado del palo derecho del arquero De Amores fue lo único de Racing hasta ese momento. Hasta que el 10 frotó la lámpara y habilitó al goleador. Y el 9, claro, no perdonó.
En este tipo de partidos, chivos no solo por la presión sino también por un rival que te batalla cada pelota, la personalidad y la calidad individual son los dos factores que suelen terminar haciendo la diferencia. Y Racing, al que durante todo el año se le reclamó respuestas por fallar en los partidos importantes, esta vez sacó chapa, esa que se necesita para salir campeón, y demostró que está preparado para intentarlo.
No depende de sí mismo, está claro. Ahora aguardará una manito de Gimnasia, que el jueves recibirá a Boca para terminar de disputar los 81 minutos pendientes de aquel duelo suspendido en la fecha 23. Una victoria del Xeneize en el Bosque lo vuelve a situar por encima de la Academia, que hizo lo que tenía que hacer y mantiene su chance hasta el final.
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