2 mayo, 2024

River le ganó un partido caliente y con polémica a Lanús en La Fortaleza.

Con goles de José Paradela y Lucas Beltrán, River derrotó a Lanús 2-0 y se metió en puestos de arriba. Le anularon dos goles al Granate, que explotó de bronca.

En un partido con polémica y una atmósfera picante en La Fortaleza, River superó por 2-0 a Lanús con goles de José Paradela y Lucas Beltrán, uno en cada tiempo, y alcanzó los 12 puntos en la Liga Profesional. De esta manera, se ubica momentáneamente entre los primeros puestos de la tabla de posiciones.

La jugada de la discordia fue en el empate del Granate, anulado tras una larga revisión en el VAR: ¿Qué paso? José Canale estaba en offside y el árbitro consideró que obstruía la visión de Franco Armani en el cabezazo de Cristian Lema que fue a parar adentro.

El Millo la pasó mal durante el primer cuarto de hora ante un Lanús que arrancó intenso y con muchos espacios cerca del área para poner a prueba a Franco Armani en varias ocasiones. Con el correr de los minutos, y sobre todo cuando convirtió el primer gol, el equipo de Martín Demichelis tomó el dominio de la pelota y mostró su mejor versión en ataque.

La conducción de José Paradela, una vez más, fue clave para sentar las bases en campo contrario. Nicolás De La Cruz, en su vuelta a la titularidad, también le dio otra creación del medio para arriba. Y en su mejor momento, cuando más cómodo se sintió con la posesión, los de Núñez abrieron la cuenta.

A los 25 minutos, Paradela recibió un milimétrico pase al medio de Milton Casco, la empujó al fondo de la red y coronó una buena combinación de pases riverplatenses en zona prometedora, que comandó Esequiel Barco y pasó de derecha a izquierda.

Como en el primer periodo, la visita empezó flojo y el Granate lo fue a buscar. Lo encontró con el cabezazo de Lema en su mejor momento, pero se quedó con las ganas del festejo por el offside de Canale.

A los 87, Lucas Beltrán definió al primer palo con un derechazo y estiró la ventaja para River. Lanús descontó en el descuento. No obstante, por otro fuera de juego cobrado por el VAR, el árbitro anuló el gol.

El final fue muy caliente. El público arrojó proyectiles (lastimaron a Enzo Díaz con un botellazo) y los jugadores granates se fueron protestando contra la terna arbitral y la tecnología.