Se espera que la familia dueña de la vivienda y el propietario del vehículo realicen la correspondiente denuncia.
Un chapista estrelló el auto de 4.000.000 de pesos de un cliente. Lo incrustó en el frente de una vivienda y huyó. Se llevó la patente para evitar ser identificado. Pero la policía dió con el propietario horas después del accidente.
Tal fue la sorpresa del conductor al escuchar a los oficiales decirle que su auto estaba enterrado en el muro de una casa. “Mi auto está en el chapista. No puede ser”, dijo atónico el conductor (informó la policía).
La noticia trascendió el sábado en plena madrugada.
Un gran estruendo despertó a la familia que vive en avenida Pomar y calle Rizzuto. Un automóvil Volkswagen Beetle, conocido popularmente como “escarabajo”, destruyó parte de la vivienda. Eran las 00.10 del sábado-.
“El auto es un vehículo que el propietario lo dejó en confianza para un fin determinado que era un arreglo. Se desconocen los motivos por los cuales el chapista lo tenía en uso a esas horas”, afirmó el jefe de la Policía, Arnaldo Molinas. “Estamos tratando de establecer por qué se produjo el siniestro que produjo daños importantes en una vivienda”.
Además, señaló que el chapista está identificado y que se realizan los trámites correspondientes al caso. “Tanto la familia afectada como el propietario del auto analizan realizar una denuncia judicial”, dijo.
Cuando sucedió el caso, los vecinos llamaron a la Policía y arribó personal de la Comisaría Quinta y del Grim 4, que verificó la situación y constató que el conductor del automóvil se había dado a la fuga y se había llevado las patentes, según indicaron.
Al investigar, llegaron hasta el propietario del vehículo, quien explicó que hace unos días lo llevó a un taller de chapa y pintura para unas refacciones.
Fuente: El Litoral
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