2 mayo, 2024

Apuñalaron en prisión a Larry Nassar, el médico que abusó a más de 250 gimnastas estadounidenses

Larry Nassar fue condenado a 175 años de prisión por agredir sexualmente a gimnastas, en su mayoría menores. Dentro de sus víctimas se encuentran medallistas olímpicas como Simone Biles, Aly Raisman y McKayla Maroney.

El médico deportivo Larry Nassar recibió varias puñaladas el domingo pasado durante un altercado con otro recluso en una prisión federal de Florida, Estados Unidos. El hombre, que formaba parte del equipo de gimnasia del país norteamericano y fue condenado por abusos sexuales, se encuentra estable.

El episodio tuvo lugar en la penitenciaría Coleman en Florida. Según informó Joe Rojas, presidente de Local 506 (el sindicato que representa a los empleados de la cárcel donde se encuentra el médico), Nassar (59) recibió un total de diez puñaladas: seis en el pecho, dos en el cuello y otras dos en la espalda. Luego del hecho fue trasladado a un hospital y se encuentra estable.

A través de un comunicado, una fuente de la oficina federal de prisiones confirmó el ataque, que ocurrió durante la tarde del domingo, pero no quiso identificar a las personas implicadas. Además, indicó que el personal médico de la prisión intervino rápidamente para salvarle la vida. El FBI abrió una investigación sobre el incidente, en el que nadie más resultó herido.

No es la primera vez que Nassar fue atacado. En ese sentido, Randall Margraves, el padre de tres de sus víctimas, intentó agredirlo en la corte.

Luego de que dos de sus hijas declararon ante el tribunal, el hombre le solicitó a la jueza Janice Cuningham que le permitiera pasar un tiempo a solas con el médico. «Te pediría como parte de la sentencia que me concedas cinco minutos en una habitación cerrada con este demonio», imploró.

Ante la negativa de la magistrada, Margraves sacudió la cabeza e insultó al condenado, lo que le valió una advertencia de Cuningham sobre su lenguaje. Sin embargo, el hombre no se detuvo ahí y se abalanzó sobre Nassar, pero luego fue derribado al suelo.

Los abusos sexuales y la condena de Larry Nassar

Nassar fue condenado a 175 años de prisión por agredir sexualmente a gimnastas, en su mayoría menores. Dentro de las más de 250 víctimas del médico se encuentran medallistas olímpicas como Simone Biles, Aly Raisman y McKayla Maroney, quienes testificaron contra el culpable en septiembre de 2021, durante una audiencia del Senado de Estados Unidos.

En medio de su juicio, Nassar admitió haber agredido sexualmente a deportistas mientras trabajaba en la federación estadounidense de gimnasia, la Universidad Estatal de Michigan y en una sala de Lansing, en el mismo estado. En paralelo, se declaró culpable de poseer pornografía infantil.

Durante las declaraciones de las víctimas en el proceso, varias atletas testificaron que, a lo largo de las más de dos décadas que sufrieron abusos sexuales, le habían contado de los episodios a sus entrenadores y otros adultos de su entorno. Sin embargo, el médico no fue denunciado ni se tomaron medidas para apartarlo.

Más de cien mujeres, incluida la medallista de oro olímpica Simone Biles, solicitaron de manera colectiva más de mil millones de dólares al Gobierno federal debido a la incapacidad del FBI al momento de detener a Nassar cuando los agentes tuvieron conocimiento de las acusaciones en su contra en 2015. El hombre fue detenido por la policía de la Universidad Estatal de Michigan en 2016, más de un año después.

En 2018, la Universidad Estatal de Michigan logró un acuerdo de 500 millones de dólares con más de 300 mujeres y niñas. El establecimiento educativo había sido acusado de inacción durante años. Posteriormente, en 2021, las víctimas de Nassar llegaron a un acuerdo de 380 millones de dólares con la federación estadounidense de gimnasia, el segundo más grande registrado para víctimas de abusos sexuales.

El Tribunal Supremo de Michigan rechazó el mes pasado una última apelación de Nassar. La defensa del médico argumentó que fue tratado injustamente en 2018 y que merecía una nueva audiencia, basándose en los comentarios vengativos de un juez que lo describió como un «monstruo» que se «marchitaría» en prisión como la bruja malvada de «El mago de Oz». Al respecto, en aquella ocasión la jueza del condado de Ingham, Rosemarie Aquilina, manifestó: «Acabo de firmar tu sentencia de muerte».

Si bien la Justicia reconoció que le «preocupaba» la conducta de la magistrada, reconoció que Aquilina, a pesar de sus comentarios provocadores, se atuvo al acuerdo de sentencia elaborado por los abogados del caso. «Nos negamos a gastar recursos judiciales adicionales y a someter a las víctimas de este caso a un trauma adicional cuando las cuestiones en cuestión no son más que un ejercicio académico», afirmó el tribunal en un auto de dos páginas.